Hemos recibido este mensaje de M.ª José E.A. que compartimos con vosotros, pues aunque sabemos que nuestro sistema tiene distintos porcentajes de efectividad, merece la pena al menos intentarlo. Gracias M.ª José por ser como eres y por tus palabras.
Agradecerte tu testimonio, lo cierto es que pone los pelos de punta, eres fantástica, tienes una fuerza inmensa y hay tanto que aprender de vosotras…nos has emocionado mucho. GRACIAS
“Quería agradeceros de corazón vuestra disposición y deciros que gracias al gorro ha sido mucho más llevadero para mi el tratamiento de la quimio, ya que como lo pasé hace 5 años tenía que intentarlo y afortunadamente me ha salido muy bien al no caerse el pelo y poder llevar una vida lo más normal posible, tanto en mi autoestima, en mi esfera personal como al salir a la calle.
En marzo de este año 2019 mi oncóloga confirmó que volvía a ser necesario el tratamiento de quimioterapia para hacer frente a la recaída del cáncer de mama que había sufrido hacía 5 años. En aquel momento, con 46 años recibí 4 sesiones de quimioterapia y 35 de radioterapia de forma preventiva, ya que había sido operada previamente. Mi peor recuerdo, junto con el miedo y la preocupación por mi salud al encontrarme con una enfermedad grave, fue la pérdida del cabello. Durante todo el tratamiento de quimioterapia sentí una profunda tristeza que me invadía al verme sin pelo en la cabeza, me condicionaba mi bienestar diario, me sentía mal cuando estaba sola y también cuando estaba acompañada. Al salir a la calle utilizaba una peluca, pero yo no estaba cómoda. Fueron cinco meses sin pelo y muy largo el tiempo hasta que vuelve a salir y no como el que era antes.
Y este año la historia se volvía a repetir. ¡Terror!. Otra vez el cáncer, de nuevo el miedo y la angustia por la enfermedad y también volver a perder el cabello. Por fortuna, para mí casi un milagro, tuve conocimiento en el Hospital de Navarra que por una empresa externa había un sistema con un gorro frío que impedía la caída total del cabello, de la alopecia tras recibir la primera sesión de quimio. Me dije a mí misma que lo tenía que intentar. Tenía poco tiempo, un lunes me puse en contacto con Oncobel y el viernes tenía ya la primera quimio. Me vino muy bien hablar con una persona que lo había utilizado y su experiencia había sido fantástica. Eso me animó mucho y reafirmó mi decisión.
Gracias a la buena gestión y rapidez de Oncobel se puso en marcha todo para que en las ocho quimios que he recibido utilizara el gorro frío. Lo que ha permitido que en estos 5 meses de tratamiento no haya sufrido la pérdida de mi cabello. Al principio con mucho temor pero he conservado mi estilo personal, me he sentido yo misma, mi autoestima no ha sufrido un bajón y he podido hacer una vida normal, con tranquilidad que es lo que durante este periodo de mi vida junto con el deseo de que el tratamiento haya ido bien , han sido mis objetivos. Puede parecer frívolo, superficial dar tanto valor al aspecto físico porque está claro que lo importante es la salud, pero en estos meses de tratamiento, a pesar de la tristeza, del miedo, de la pena por la recaída en la enfermedad, me he sentido fuerte y en ello ha influido mucho sentirme bien.”
M.ª José E.A. (Pamplona)
Hospital: Complejo Hospitalario de Navarra